▷ RESUMEN:【 LA FUNDACIÓN 】 de Buero Vallejo


 La Fundación
(Resumen de todo el libro) 






libro con el título La Fundación a su lado hay una celda de una cárcel




Contexto:


Tomás es un prisionero de una cárcel en la que comparte celda con cuatro compañeros: Asel, Tulio, Lino y Max. Tomás entra en la cárcel debido a que es Rojo y los Falangistas le pillaron repartiendo octavillas entre sus compañeros. Tomás intentó suicidarse en la cárcel debido a que delató a sus compañeros y se siente muy mal por ello, no obstante Asel consigue salvarle la vida. A partir de aquel momento, el joven empieza a imaginarse que está en la Fundación, un centro para alumnos con becas para que finalicen sus proyectos y amplíen sus estudios, esto lo hace para evadirse de la realidad. A medida que va avanzando la historia se dará cuenta de que lo que está viviendo es una fantasía.




Personajes:


Solo 6 personajes con nombre propio (personalidad, identidad): Tomás, Asel, Tulio, Max, Lino y Berta.

● Otros referidos mediante clasificaciones: el Hombre enfermo, el Encargado, el Ayudante,

Primer Camarero, Segundo Camarero.


● Tomás: inventa la Fundación. A medida que la historia avanza se da cuenta de que está viviendo una fantasía y que reside en una cárcel. 

● Berta: mismo número de identificación que el de Tomás. 

Desdoblamiento de la mente de Tomás.

○ Ratón, ahonda en ese desdoblamiento:

Tomás como ratoncito a salvar.

○ Al final, persiste el Tomás activo que ha de

seguir luchando hasta el final.

● Asel: guía al grupo. Sus reflexiones son las más hondas: lucha, pero rechaza la violencia controlando la impulsividad y la rabia. Tiene un plan para escaparse de la cárcel. Se sacrifica para darles una oportunidad a sus compañeros Tomás y Lino. 

● Tulio: personaje que más evoluciona. Al comienzo de la historia, siente antipatía por Tomás y su mundo imaginario, no obstante, cuando se acerca la ejecución de Tulio en el paredón, muestra esperanza y se reconcilia con Tomás. 

● Lino: Personaje agresivo que no confía en ninguno de sus compañeros. Lanza a Max por la barandilla de la cárcel consiguiendo su muerte. Esto lo hace debido a que Max traiciona a sus compañeros a cambio de tratos de favor con los guardias. 

● Max: Personaje muy tranquilo y que nunca se enfada. Todos los personajes siguen el rollo de las fantasías de Tomás, pero él es el que más. Traiciona a sus compañeros y cuenta a los guardias el plan de fuga que tiene Asel. Es asesinado por Lino. 



Resumen de todo el libro:

(***) → Representa cambio de escena.



Parte Primera:


La historia comienza con un personaje describiendo la habitación donde reside. No es amplia ni lujosa, pero tiene todo lo necesario para ser un buen lugar para descansar. Tras el ventanal de la habitación se muestra un maravilloso paisaje: límpido cielo, majestuosas montañas, la fulgurante plata de un lago, remotos edificios que semejan extrañas catedrales, el dulce verdor de praderas y bosquecitos.

El personaje da a entender que el sitio donde reside es algo parecido a un hotel o residencia.


Una vez acaba de describir sus alrededores, empieza a sonar una suave música en el ambiente: la Pastoral de la Obertura de Guillermo Tell, de Rossini.

En la sala hay otro hombre, está acostado entre las sábanas de una cama y no se mueve.


El personaje que describe la sala se llama Tomás, un chico de 25 años y sobre su camisa gris destaca un pequeño rectángulo negro con la inscripción C-72.


Tomás rompe el hielo con el hombre que está descansando y le pregunta si le gusta la Música de Rossini. También menciona que el lugar donde están se llama la Fundación.

Al parecer, el hombre está enfermo y Tomás insiste en tener una conversación con él, pero este no quiere hablar porque está cansado.

Tomás está preocupado por el hombre porque hace tiempo que no le ve comer, beber ni ir al baño.


* * *


Aparece en la habitación una chica llamada Berta, en su pecho tiene la inscripción A-72.

Tomás abraza a la chica, pero esta no quiere porque tiene un ratón blanco en las manos. Lo había sacado de uno de los laboratorios de la Fundación.

Berta es la novia de Tomás y al ratón le ha puesto de nombre Tomás, rabo largo.

Tomás da a entender que la Fundación es un centro que da becas a estudiantes para que hagan proyectos y amplíen sus estudios.

Tomás es escritor y su intención en la Fundación es acabar una novela que está escribiendo.

Tomás y Berta discuten debido a que la chica quiere que se quede al ratón y lo esconda para así salvarlo de ser experimentado, pero Tomás se niega y defiende que los animales son necesarios para el avance científico.

Finalmente, Berta va a la puerta de la habitación prometiendo que salvará al ratón.

Tomás la detiene y comenta que sus demás compañeros de habitación vendrían pronto y quieren conocerla, ya que no creen que haya ido a la Fundación.

Berta se asquea del un olor desagradable y Tomás le comenta que proviene del cuarto de baño debido a que la taza filtra mal.


Berta se tiene que ir, Tomás insiste para que vuelva por la noche, pero ella dice que no puede (porque tiene que proteger a su otro novio - el ratón) y finalmente se va de la habitación


* * *


Un tiempo después entran los otros cuatro compañeros de Tomás después de dar un paseo.

El primero es Tulio (40 años de rostro afilado y serio con la marca C-81 en el pecho de su camisa).

El segundo es Max (35 años con la marca C-96 en su camisa)

El tercero es Lino (aparente 30 años con la marca C-46 en su camisa)

El cuarto es Asel (aproximadamente 50 años, cabello gris, expresión reflexiva, en su rectángulo poner C-73).


Después de hablar los compañeros de lo que han hecho en el día, entra en la habitación el encargado de la Fundación y su joven ayudante. El encargado pregunta si todo está en orden y tratan a los presentes con amabilidad, al cabo de un rato se van de la habitación.


Tomás pregunta si alguien quiere cerveza y sus compañeros se ríen al escuchar aquello, Max dice que prefiere whisky y que se lo servirá el mismo, Tulio suelta una carcajada y Asel lo reprende.

Tomás reparte cervezas a sus compañeros mientras estos se ríen.

(El lector no entiende por qué esta situación les parece graciosa a los compañeros de Tomás (más adelante se sabrá por qué)).


Asel pregunta por quién les había visitado aquella mañana en la habitación y Tomás le dice que fue su novia Berta, sus compañeros no le creen y Tomás le dice que pregunten al hombre que descansaba que también estaba.

Tulio le hace callar a Tomás y dice que no le aguanta, se enfada y entra en una gran discusión con todos los presentes porque no le gusta que hable de su novia.

Tulio es fotógrafo.


El timbre del teléfono de la habitación comienza a sonar y Max lo coge. La llamada es para Tomás y el chico coge el aparato. Berta ha sido la que ha llamado y Tomás le insiste que vaya a la habitación para que sus compañeros la vean.

Una vez acaba la llamada, Tomás le hace creer a Tulio que su novia sí que está en la Fundación, ya que Max ha escuchado su voz por el teléfono. Tulio y Tomás vuelven a pelearse, pero Asel actúa de moderador y les hace callar.


Los compañeros se preguntan la hora en la que vendría la comida a la habitación.

A Asel le toca quedarse con la comida del enfermo porque este no puede comer.


Los compañeros quieren fumar, pero no tienen cigarros, no obstante Tomás enseña una caja llena de estos, pero Lino se defrauda.

(El lector no entiende por qué Lino se defrauda si era uno de los compañeros que más quería fumar).


Tomás empieza a preparar la mesa para comer y Tulio va a ayudarle para reconciliarse, no obstante, Tomás le recrimina que no le está ayudando y que se está riendo de él porque ni siquiera está cogiendo los vasos. Tulio niega e insiste que le está ayudando, pero Tomás dice que los que está haciendo es una broma de mal gusto.

Max ayuda a poner la mesa a Tomás.


Lino es ingeniero.


Asel que es médico, le dice a Tomás que está demasiado flaco y le cede la comida del enfermo. Tomás pregunta por qué el enfermo no puede comer nada y Asel le cuenta que tiene que hacer una dieta absoluta.


El encargado llega a la habitación con la compañía de dos camareros y empieza a recitar el menú del día.





II:


Tomás lee un libro de producciones (arte) y comenta el cuadro llamado “El arte de la pintura” del pintor Vermeer.

Al principio Tomás cree que ese cuadro era de Terborch, pero finalmente rectifica la confusión. También hacen referencia al “Matrimonio Arnolfini” y a un cuadro de Joseph Mallord William Turner.







Tulio tiene como objetivo en la Fundación mejorar la técnica de holografía.


Tomás no encuentra la caja de tabaco que había guardado en el bolsillo (Este es el primer objeto que desaparece en la habitación).


Los compañeros siguen quejándose del aroma pestilente que desprende la habitación.


A Tomás le toca tirar la basura y limpiar el cuarto. Cuando va a por la escoba se encuentra a una mucho más vieja y sucia de la que utilizó por la mañana (Este es el primer objeto que cambia por uno mucho más viejo)

(Al leer esto, el lector puede intuir que algo va mal en la historia “no cuadra” teniendo en cuenta la desaparición de la caja de tabaco y la transformación de escoba por una más vieja).

Tomás culpa a sus compañeros de cambiar las cosas de su sitio.


Cuando el encargado llega a la habitación, Tomás le da la basura que ha recogido. El encargado cierra la puerta y el joven no entiendo por qué la ha cerrado. Cuando, le pregunta a sus compañeros, Lino le dice que cierra la puerta todas las tardes.

Tulio discute con Tomás y le dice que si le molesta que haya hecho eso, que abra la puerta y que le llame la atención. Asel y Max le dicen a Tulio que está loco por haberle dicho aquello. (El lector no entiende por qué tanto miedo a hablar con el encargado si parece una persona buena y comprensiva)

Lino cree que deberían llevar a Tomás a la enfermería. (El lector no entiende por qué, si Tomás aparenta estar cuerdo)


Tulio menciona un plan que tiene Asel, pero no cuenta de que trata. (Al principio, el lector no entinde por qué Asel tiene un plan. Este plan lo revelará más adelante).



* * *


Asel calma a sus compañeros para que no se alteren y empiezan a jugar a hacer fotos. Tulio le dice a Tomás que cuando revele las fotos se las podrá dar a sus padres, pero el joven dice que no tiene padres y se las regalará a Berta.

Tomás intenta encender la luz de la lámpara para que las fotos se vean mejor, pero esta no funciona, intenta con la televisión y la radio, pero tampoco.

Todos los compañeros de la habitación se reúnen y Tulio simula preparar la cámara y finge enfocarlos con un vaso. (El lector no entiende por qué Tulio no coge la cámara “seguramente sea para reírse de sus compañeros”). Tulio le da al vaso un golpe con el dedo y dice que ya ha hecho la fotografía. Tomás se sobresalta y va a por Tulio enfadado porque se está burlando de los demás. Tulio y Tomás se pelean.

Asel intenta separarlos sin éxito.


Tomás empieza a descubrir que muchos de los objetos que había en la habitación han desaparecido o se han transformado en unos objetos más viejos.

Dos silloncitos han desaparecido y en su lugar hay dos petates, después un vaso roñoso en vez de una máquina).

Asel no es realmente médico.

Tomás sigue viendo como toda la estancia está cambiando por completo y se está transformando en una habitación parecida a la de una celda de cárcel.

Tomás, al escuchar al hombre enfermo suplicar por comida, exige a sus compañeros que le alimenten, pero estos no hacen nada. Este se abalanza sobre Asel y empieza a llamar a sus compañeros asesinos porque están matando al enfermo. Los compañeros piden a Tomás que se detenga y que no arme jaleo para que no venga el encargado.


* * *


El encargado y su ayudante interrumpen en la habitación.

El encargado destapa al hombre enfermo y descubre que está muerto, pregunta cuántos días ha estado muerto y Asel dice que seis.

Tomás no puede creer lo que está escuchando, era imposible que estuviera muerto si hacía un momento le estaba hablando.

Los camareros entran en la habitación y se llevan al cuerpo, el encargado y su ayudante también se van de la sala y el encargado dice que se atengan a las consecuencias. (El lector descubre que la Fundación no es un centro de becas, sino una prisión. También se puede intuir que el olor fétido que desprendía la habitación provenía del cadáver del enfermo que estaba en descomposición).


Lino le comenta a Tomás que él era el único que podía escuchar al enfermo.

El enfermo había muerto de inanición. Los prisioneros no le dijeron nada a los guardas para así llevarse su ración.




Parte segunda:


Tomás se da cuenta de que en la habitación han desaparecido la lámpara y la televisión y le cuesta asimilar que todo ha sido producto de su imaginación.


Asel revela que después del descubrimiento del muerto Tomás recibió la visita de su novia Berta en los locutorios.


El sonido de unos portazos que se acercaban cada vez más a la habitación interrumpieron la conversación que tenían los compañeros. Lino indica que es el recuento y todos empiezan a formar.

El encargado y su ayudante entran a la habitación para recoger la basura y aprovechan para inspeccionar la sala, al cabo de un momento se van.

Tomás se da cuenta de que cuando abrieron la puerta los hombres, detrás de ellos, no se mostraba un campo como en anteriores ocasiones, sino otras puertas. (Tomás empieza a pensar que está en un lugar que no le corresponde).


Ya han pasado tres días desde de que el encargado descubrió la muerte del enfermo y Asel comenta que deberían estar en la planta baja y es raro que todavía no los hubieran trasladado allí. (El lector puede deducir que la planta baja es la parte de la cárcel donde llevan a los prisioneros que se portan mal).


Max le pregunta a Tomás por su visita en el locutorio. El joven comenta que allí se vio con Berta y esta lloraba por algo que él desconocía.

Asel cree que llamaron a Tomás a los locutorios para que revelara las intenciones de sus compañeros por haber matado al enfermo.

Asel insiste y le pregunta a Tomás de que hablaron en el locutorio, Tomás niega todas las suposiciones que hace su compañero y repite reiteradamente que estaba con su novia hablando.

Asel se pone muy nervioso con Tomás y Tulio lo calma.


Los compañeros de Tomás piensan que él es el culpable de que no les trasladen abajo.


* * *


Para calmar el ambiente, Tulio empieza a hablar sobre su novia, el hombre le lleva veinte años y siente un gran amor por ella. Su novia está en el extranjero por una beca que tiene. Es doctora en Ciencias Física. Pasaron un año juntos en una Universidad de otro país donde jugaban con los aparatos con los que disponían para hacer holografías.

Se gastaban muchas bromas, Tulio cuenta la anécdota de que un día ella le gastó una broma proyectando su holograma leyendo un libro y cuando Tulio quiso besarla este se encontró que no era ella en realidad.


Tulio tiene la esperanza de volverse a encontrar con su novia.


* * *


El encargado y su ayudante entran en la habitación y llaman a Tulio para que saliera con todo lo que tuviera. Todos los compañeros están tristes y Tulio se despide de ellos. (El lector puede intuir que se llevan a Tulio para fusilarle).

Lino le grita a Tomás que van a matar a Tulio.


Asel le pregunta a Lino cuantas veces ha estado en la Fundación (cárcel) y este responde que es su primera vez, Asel dice que esta era su tercera.


Todos se van a dormir.


* * *


Tomás despierta mientras sus compañeros están durmiendo y se encuentra a Berta a su lado. El joven le pregunta por qué lloraba en el locutorio y esta le dice que era por su ratón Tomás que está muy enfermo. Después se acuestan y empiezan a besarse.

Asel interrumpe la escena y Tomás le dice a Berta que se fuera al baño de la habitación. Asel no sabe con quién está hablando su compañero.

El joven va al baño para demostrar a sus compañeros que su novia está en la habitación y una vez abre la cortina no encuentra a nadie.

Tomás se desmoraliza y corre hacia la puerta de la habitación y la empuja inútilmente mientras grita que quiere salir.

Los presentes en la sala forcejean con Tomás para que no arme más escándalo y así no llamar la atención del encargado.


Tomás reconoce que su novia nunca fue a la Fundación y que está delirando.


Max cree que Tomás está actuando, no cree que esté loco y que ahora está simulando un regreso a la normalidad.


El hecho de descubrir que Berta nunca ha ido a la Fundación es un punto de inflexión para el mundo ficticio que crea Tomás para afrontar la realidad.

Asel le pregunta a Tomás sobre en que lugar están y Tomás que ya ha vuelto a la cordura le contesta diciendo que están en la cárcel, no obstante, este no lo recuerda con certeza.


Todos los presentes en la habitación están condenados a muerte.


Asel habla de las causas por las que lucha (El lector puede deducir que Asel y sus demás compañeros de la habitación son Rojos que les han arrestado los Falangistas).


El ratón Tomás ha muerto. (El lector puede deducir que el ratón representa el mundo imaginario de Tomás, que una vez vuelve a la realidad, esto provoca la muerte al animal).




II:


El ventanal de la habitación desaparece y de la imaginación de Tomás solamente queda la cortina que tapa el lavabo.


Asel sigue preguntando a Tomás por la vez que lo llamaron para que fuera al locutorio, el joven defiende que no les había contado nada más a los guardias de lo que ya les había dicho a sus compañeros.


Lino dice que no es ingeniero, que en realidad es Tornero.

Asel no es médico, pero si es ingeniero.

Max no es matemático como Tomás se imaginaba.

Tomás había cambiado y modificado los oficios de sus compañeros.


Tomás cuenta que Berta fue a locutorios, estudia técnicas de laboratorio, pero ninguna Fundación la ha becado. Acababa de perder su empleo cuando le detuvieron.



* * *



Una voz llama Max para que fuera al locutorio. Max piensa que le ha visitado su madre.


Lino revela que Tomás intentó suicidarse (quiso tirarse por una barandilla de la prisión) pero Asel lo impidió, después de aquel suceso fue cuando el joven empezó a imaginarse cosas para evadir la realidad.

Tomás comenta que antes de entrar a la cárcel, él denunció a sus compañeros de celda y a otros más, provocando que les condenaran a muerte.

A Tomás le sorprendieron repartiendo octavillas y él delató a quien se las dio.


Tomás se siente culpable por haber delatado a sus compañeros, se encuentra mal de la barriga y se va al baño, un momento después, la cortina que le tapa desaparece. Nunca hubo una cortina en el baño y todos los compañeros veían como hacían sus necesidades los demás.


Asel cuenta que hace muchos años le torturaron y delató a un compañero suyo, el cual mataron.


Lino deduce que Asel tiene la intención de bajar a las celdas de castigo para escaparse de la cárcel con un plan que todavía no le han contado.

Asel lo admite y cuenta que con la muerte del enfermo tenía la intención de, aparte de obtener su ración, también que trasladasen a todos a la planta de abajo para escaparse de la cárcel con un elavorado plan que cuenta a los presentes.


* * *


Asel sabe que uno de sus compañeros se ha chivado a los guardias del plan que tenía y por eso no les bajan a la planta de abajo. Sabe que Tulio y Tomás no han podido ser.

Lino sospecha de Max porque un día le vio hablar con un guardia el cual se reía con él. Por otro lado, también vio como se dirigía a las oficinas donde estaban los guardias de la cárcel y una vez llegó a la celda, este dijo que había hablado con su madre.

Lino convence a sus compañeros y todos piensan que Max fue el soplón del plan de Asel.


Los compañeros piensan sobre que hacer con Max una vez entre a la habitación y Lino está a favor de darle un buen escarmiento y acosarle (tiene un plan para hacerlo, pero no lo revela), por otro lado, Asel piensa que deberían disimular que saben que es un soplón.


Max entra en la habitación. Lino le dice que cinco minutos después de que le llamasen, también le llamaron a él para que fuera al locutorio debido a que sus padres le habían visitado, pero una vez entró allí no le encontró.

Max no duda que sospechan de él, dice que no ha visto a Lino en el locutorio y no le gusta la broma que le están gastando.

Lino le comenta que un día le había visto en la oficina con un guardia y Max lo niega. Lino sabe que tiene tratos de favor con un guardia que le da de comer a cambio de que le informe sobre sus compañeros. Lino obliga a Max a que le suelte el aliento y al olerlo descubre que ha bebido y ha comido mientras estaba supuestamente en el locutorio con su madre.

Max admite que un guardia le había dado un vaso de vino y Lino le exige que le diga todo lo que le ha soplado.

Max corre hacia la puerta de la habitación y empieza a aporrearla. Lino le coge del cuello y se escuchan pasos de fuera que se acercan a la habitación.

Cuando el encargado y el ayudante entran, Max les suplica que les saquen de allí.


El encargado le dice a Asel que salga de la habitación para interrogarle. Asel se despide de sus compañeros (menos con Max) y sale corriendo de la habitación.

El ayudante y el encargado intentan atraparle, pero Asel se tira por la barandilla cayendo al vacío para así no hablar.


En la cárcel se empiezan a escuchar los gritos de los reclusos que gritan “¡Asesinos!” refiriéndose a los guardias.


Lino aprovecha el momento para abalanzarse hacia Max y arrojarlo por la barandilla. Lino entra rápidamente a la habitación y dice que no le han visto tirar a su compañero del precipicio.


El encargado y su ayudante entran en la habitación y quieren explicaciones, Tomás se levanta enfadado y hace como si siguiera en su mundo imaginario exigiendo que le aclaren lo que está sucediendo en la Fundación.

El ayudante pregunta quién ha tirado a Max, y Tomás dice que nadie, que se ha tirado solo. El ayudante recoge las pertenencias de Asel y Max y se va de la habitación con el encargado.


Lino y Tomás no saben lo que les deparará una vez acabado estos acontecimientos.


El ayudante entra en la habitación y les dice que salgan con todo lo que tengan.

Una vez los dos compañeros salen de la habitación, en esta vuelven a aparecer los objetos que Tomás se había imaginado al principio de la historia.


La historia acaba con un final abierto. (No se sabe lo que les van a hacer a los dos prisioneros). 


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